La Urología de la Litiasis o Urolitiasis es la subespecialidad médica que se encarga del estudio, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades que se manifiestan con formación de cálculos urinarios. Todos los cálculos urinarios deberían tratarse para evitar complicaciones serias, e incluso fatales.

Al tratarse de una patología de gran incidencia y prevalencia, este campo representa un porcentaje alto de pacientes en nuestras consultas. Aproximadamente un 10% va a sufrir en algún momento de su vida un cólico nefrítico. En otros muchos casos el diagnóstico se realiza de forma incidental al realizar una radiografía o ecografía solicitada por otro motivo. La mayor parte de las llamadas que recibe un urólogo desde un Servicio de Urgencias corresponden con cólicos renales por lo que en la práctica habitual de nuestro trabajo supone un control actualizado y preciso del manejo de estos pacientes.

La mayoría de los cálculos pequeños finalmente se expulsan del cuerpo por sí solos. El tratamiento varía de acuerdo con la localización, el tamaño, y la composición química del cálculo.

En caso que los cálculos tengan un tamaño de difícil expulsión, se ubiquen en zonas comprometidas, o aparezcan complicaciones (fiebre, dolor rebelde al tratamiento, alteraciones funcionales del riñón) la labor del especialista ha de ser preferente e incluso urgente para dar una rápida solución al problema. De este modo, las diferentes herramientas con las que contamos son:

Litotripsia Extracorpórea por ondas de choque (LEOC – ESWL)

En este procedimiento se utiliza una máquina que genera ondas de choque fuera del cuerpo que se apuntan y dirigen para fragmentar el cálculo dentro de la vía urinaria. El tratamiento está indicado para cálculos que no sean mayores a 2-3 cm y para situaciones de urgencia no sería la mejor opción. No se trata de un tratamiento quirúrgico por lo que no es necesario el ingreso del paciente y sería suficiente una analgesia intravenosa para el control del paciente durante la sesión.

Cistolitectomía endoscópica

La naturaleza de los cálculos de la vejiga es diferente a las del tracto urinario superior ya que la formación de las litiasis en la vejiga suele ser la consecuencia de la obstrucción al flujo de la orina que supone el crecimiento de la glándula prostática. Es por eso que se suele tratar en una sola intervención el problema prostático y el cálculo alojado en la vejiga.

Ureterorrenoscopia

La ureterorrenoscopia permite al urológo visualizar y extraer los cálculos a través de la uretra. Una vez que el cálculo se ha localizado, el cirujano puede asistirlo con pequeñas pinzas y extraerlo, o lo fragmenta usando un litotriptor endoscópico o láser. La mejora en los ureterorrenoscopios que disponemos en la actualidad (semirrígidos o flexibles) permiten acceder a todo el uréter y cavidades renales mejorando los resultados y disminuyendo la tasa de cálculos residuales tras la intervención. Al tratarse de una técnica mínimamente invasiva permite que el paciente sea dado de alta a las 24h de la cirugía.

Nefrolitectomía percutánea

Mediante la punción del riñón se crea un acceso directo desde el exterior hasta las cavidades renales lo que permite tratar casos muy complejos con grandes cálculos (litiasis coraliforme) que en algunos casos ocupan el 100% del riñón. En este caso es necesario realizar una incisión de aproximadamente 1cm en la piel lo que se considera también una técnica mínimamente invasiva y a su vez en algunos casos se realiza de forma combinada con la ureterorrenoscopia.

Cirugía Laparoscópica

En casos seleccionados es posible extraer directamente grandes cálculos alojados en el uréter o el riñón mediante técnicas laparoscópicas. Especialmente indicado si es necesario corregir en un solo tiempo quirúrgico una malformación de la vía urinaria responsable de la formación del cálculo.